Daniel Bruns

Daniel Bruns es graduado en Criminología en la Universitat de Girona, máster en análisis y prevención de la delincuencia por el Centro Crimina de la Universidad Miguel Hernández de Elche, agente de la Policía Local de Salt, profesor asociado del grado en criminología de la Universitat de Girona y tutor de prácticas de la misma titulación.

Es policía desde hace 12 años.

Nos puedes hablar un poco de tu trabajo?

Durante mi trayectoria profesional, primero a la Policía Local de Begur donde empecé y después a Salt donde trabajo actualmente, he desarrollado las competencias que son propias de los cuerpos de policía local: ordenación y regulación del tráfico, control de ordenanzas municipales, seguridad ciudadana, policía comunitaria, etc. Durante estos años, el hecho de haber trabajado en diferentes cuerpos cada uno con sus peculiaridades, y de haber pasado por diferentes unidades, me ha aportado una visión global de la profesión muy enriquecedora. El trabajo de policía es muy dinámica, no sabes nunca que te encontrarás, y esto es precisamente uno de los aspectos que hace que te enganche. Un día puedes estar regulando el tráfico en un cruce y en el jefe de un rato estás deteniendo el autor de un robo.

¿Consideras que pones en práctica lo que has aprendido en el grado?

Sí, está claro. La función policial está directamente relacionada con los conocimientos adquiridos durante el grado. Cuando empecé a estudiar el grado, ya hacía unos años que era policía. Con mucho de esfuerzo y constancia he ido compaginando el trabajo y la familia con mi formación criminológica, primero con el grado y después completando los estudios con el máster. Tengo que decir que el hecho de tener una experiencia laboral previa me ha ayudado en mis estudios. Me ha aportado una visión práctica que sin trabajar no puedes tener. Esto se nota, aprendes a comprender y relacionar mejor los conceptos y te permite poner en práctica, de forma directa o indirectamente, los conocimientos adquiridos. Yo siempre digo que por mí Salt ha sido mi laboratorio de prácticas. Es un municipio con una gran complejidad social y con mucho trabajo para hacer. El año 2017 pusimos en funcionamiento un proyecto piloto pionero en Cataluña para la evaluación de riesgo de reincidencia en delitos contra la seguridad del tráfico. Ha tenido una muy buena repercusión y eco mediático y actualmente seguimos trabajando de forma coordinada con otros policías y criminólogos por su implantación. Aparte de esto, he elaborado varias campañas de prevención y también gestiono las redes sociales de la policía. En resumen, puedo decir que la formación que he adquirido me ha ayudado a comprender mejor la problemática que forma parte de mi trabajo y me ha dado recursos que antes no tenía.

He de dir que el fet de tenir una experiència laboral prèvia m’ha ajudat en els meus estudis. M’ha aportat una visió pràctica que sense treballar no pots tenir.

¿Cómo te enteraste del trabajo?

El año 2007 me enteré de una oposición a la Policía Local de Begur y me presenté. Entré primero como agente interino y entonces gané plaza de funcionario de carrera después de hacer el curso en el Instituto de Seguridad Pública de Cataluña (Escuela de Policial). Unos años más tarde por cuestiones personales, volví a opositar a Salt y también gané plaza.

¿Hacía mucho que buscabas trabajo? ¿Sabías por dónde se mueves las ofertas en el ámbito criminológico?

Como ya he dicho, empecé estudiar el grado cuando ya era policía. Al principio lo hice solo con la intención de tener la titulación necesaria para promocionarme en un futuro, pero el cierto es que la criminología me ha ido enganchando cada vez más hasta el punto de continuarme formando una vez acabada el grado.

¿Cómo fue el proceso de selección?

Inicialmente no pensaba que me fueran a seleccionar porque no tengo el mejor expediente académico, pero el proyecto y la carta de motivación que presenté justificando porque era importante que se contara con profesionales de la criminología en la investigación en materia de protección a la infancia acabaron inclinando la balanza.

Después de enterarme de la convocatoria del Ministerio presenté la documentación requerida como las notas del grado y del máster, certificado de inglés, etc. Una vez superada esta primera fase tuve que presentar una propuesta de investigación junto con una carta de motivación y otra de recomendación, finalmente hice una entrevista con las personas responsables del grupo de investigación que tenían que dar feedback al Ministerio para elaborar una ponderación de todas aquellas personas que nos habíamos presentado. Unos meses más tarde salieron las listas.

Querría aprovechar en este sentido y romper una lanza a favor de la necesidad de potenciar el estudio de la criminología desde el mismo Instituto de Seguridad Pública, en los cursos de formación básica para policías.

¿Qué consideras que ha sido imprescindible para que te seleccionasen?

Inicialmente no pensaba que me fueran a seleccionar porque no tengo el mejor expediente académico, pero el proyecto y la carta de motivación que presenté justificando porque era importante que se contara con profesionales de la criminología en la investigación en materia de protección a la infancia acabaron inclinando la balanza.

Qué consejo darías a los estudiantes? Y a tus compañeros que todavía están en investigación activa de trabajo?

El mejor consejo que puedo ofrecer a los estudiantes de criminología y a los criminólogos en investigación de trabajo es que aprovechen al máximo sus estancias de prácticas y que se las tomen muy seriamente. Que no tengan miedo ni vergüenza a exponer sus ideas. A presentar proyectos. A picar todas las puertas que sean necesarias, quizás el día de mañana alguna de estas se abrirá. Las redes sociales también son una muy buena herramienta por este fin. Los criminólogos tenemos mucho que decir y mucho que hacer en multitud de ámbitos, y esto es más una ventaja que no un inconveniente. Y por supuesto, que aprovechen las ventajas que ofrece el Colegio participando en todos los congresos, jornadas y actividades formativas que los sea posible. Son puntos de encuentro y de intercambio de conocimientos donde se gestan proyectos y alianzas interesantes

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